El respeto hacia los niños, incluye cuidar sus sonrisas, sus sueños y su inocencia
Muchas veces los cuidadores o padres de nuestros niños, inmersos en nuestras dinámicas de personas adultas y estresadas no somos capaces de ver con fragilidad la naturaleza de los niños, ésa tan delicada y frágil que debemos preservar y extender en la medida de lo posible en el tiempo.
Existen los padres que desean que sus hijos crezcan pronto, que sepan resolver por ellos mismos diversas situaciones, esto con la finalidad implícita de liberarse de responsabilidades y comienzan a darles tareas que no corresponden a sus edades, sin darse cuenta de que la niñez es tan fugaz y tan determinante en la vida de una persona, que cuando nos damos cuenta esos pequeños niños en un abrir y cerrar de ojos ya son adolescentes y cosas que nos quitaban el tiempo, que incluso nos generaban molestias por interferir con lo que realmente queríamos hacer, ya solo forman parte de nuestras memorias y ellos son cada vez más independientes, más autosuficientes.
Estar a cargo de un niño es una responsabilidad mayor y a su vez es un gran privilegio. Evidentemente lleva consigo sacrificios, trasnochos, frustraciones, tristezas, pero definitivamente las satisfacciones siempre ocuparán los principales espacios.
Un niño tiene una manera particular de ver la vida, está centrado en el ahora, no sabe vivir otro momento (básicamente porque no se puede), por eso se impacientan tanto con expresiones como: en navidad ocurrirá tal cosa, o falta un mes para tu cumpleaños, o dentro de dos horas jugamos, su noción del tiempo es diferente y pueden estar, sin la intención de agobiarnos, preguntando constantemente: cuántos días faltan para mi cumpleaños!?
No desesperemos ante sus continuas preguntas, ante sus dudas, ante su necesidad de afecto y de atención cuando consideramos que no tenemos el tiempo suficiente o tenemos otras cosas que atender. Obviamente cada uno a su manera siempre tendrá múltiples roles a los cuales debe dedicarse adicional a cuidar a un pequeño, pero ninguno tiene la importancia que éste....
No desesperemos ante sus continuas preguntas, ante sus dudas, ante su necesidad de afecto y de atención cuando consideramos que no tenemos el tiempo suficiente o tenemos otras cosas que atender. Obviamente cada uno a su manera siempre tendrá múltiples roles a los cuales debe dedicarse adicional a cuidar a un pequeño, pero ninguno tiene la importancia que éste....
http://www.hoyaprendi.co/2017/03/25/no-importa-si-los-hijos-no-resultan-como-esperabamos-2/