sábado, 30 de septiembre de 2017

SI LOS NIÑOS PUDIERAN JUGAR MÁS...





Carl Honoré, en su libro de recomendable lectura Bajo presión, transcribe la siguiente cita de Nigel Cumberland, experto en coaching ejecutivo y formación del liderazgo:

"Si los pequeños pudieran jugar más, habría mejores ingenieros, mejores directivos y más inspiración en el lugar de trabajo. Si se le niega a un bebé o a un niño de entre uno y dos años la oportunidad de jugar, y después se le lleva al jardín de infancia, donde compite y se le juzga en todo momento, nace el miedo, y esto crea una falta de disposición a asumir riesgos. El resultado, adultos aburridos."


En edades tempranas, el juego nunca es una pérdida de tiempo, ni un simple entretenimiento. El juego, además de facilitar el desarrollo de las capacidades motoras, es un acto fundamental para la formación de habilidades y destrezas, para la adquisición de valores, para el desarrollo de la inteligencia racional y la inteligencia emocional. Con el juego, los niños y las niñas experimentan, comparten, pierden, ganan, aprenden a anticiparse, a concentrarse, a ser imaginativos, a ser creativos, a ser curiosos. Todos estos aprendizajes son esenciales para el futuro desarrollo de la personalidad y para una adecuada adquisición del aprendizaje.

Aprender no siempre es fácil ni cómodo, enseñar tampoco. Pero, a veces, tengo la sensación de que no empeñamos en hacerlo aún más difícil y más incómodo. En los primeros años de escolarización permitimos que el juego forme parte del proceso de aprendizaje de los alumnos, pero conforme pasan los años desterramos el juego como recurso educativo. Lo mismo sucede en el ámbito familiar, conforme pasan los años dejamos cada vez menos tiempo para el juego llenando la agenda de los niños y las niñas de actividades extraescolares formativa, que son una extensión de las actividades académicas y buscan alcanzar el mejor expediente posible, no el disfrute ni el gozo.

No me cansaré de repetir que todo aprendizaje requiere de un esfuerzo, pero que no debemos confundir constancia y perseverancia con sacrificio y sufrimiento. Aplicar a la educación los principios de la gamificación puede ayudar a conseguir la motivación necesaria para ayudar a que los alumnos se motiven y disfruten mientras se esfuerzan aprendiendo (y los docentes enseñando).

Hay un concepto psicológico que nos puede ayudar a entender esto: el flujo. Es el estado mental en el que una persona está completamente inmersa en la realización de una tarea con total implicación, absoluta concentración para alcanzar su consecución con éxito. En esas situaciones la actividad por sí misma es gratificante, el tiempo parece ir más deprisa y la motivación se retroalimenta al ir aprendiendo de los errores para alcanzar el objetivo deseado.

Si consiguiéramos que las actividades que planteamos en la escuela llevan a los alumnos a ese estado de flujo, acabaríamos de una vez con la maldita expresión "codos y más codos para aprender". Si los niños jugaran más, aprenderían más y mejor.

http://www.salvarojeducacion.com/2016/04/si-los-ninos-pudieran-jugar-mas.html?m=1

viernes, 29 de septiembre de 2017

ESPACIO DE JUEGO CON FAMILIAS

En HAZI ofrecemos también un ESPACIO DE JUEGO CON FAMILIAS
para acompañar a la familia y al bebé y niño en su desarrollo
desde una perspectiva pikleriana.





El movimiento representa una parte muy importante de la actividad en el curso de los primeros años, especialmente los cambios de postura y los desplazamientos.
Tras los recientes descubrimientos se concede cada vez más importancia a los movimientos activos en relación con el desarrollo de otras funciones psíquicas.

Emmi Pikler (Moverse en Libertad)

jueves, 28 de septiembre de 2017

“Los niños de hoy necesitan adultos que sepan asumir su responsabilidad”

             Entrevista  a 

             Heike Freire


Heike Freire apuesta por ampliar los espacios educativos, que no sean tan cerrados, para que la infancia pueda buscar sus propios intereses. También reclama que las familias se preocupen menos de la normalidad y mejoren sus relaciones con niñas y niños.



Conferenciante, educadora, psicóloga, filósofa, periodista, formadora de padres y maestros, Heike Freire tiene una gran preocupación por los entornos en los que estamos educando a nuestros niños y niñas. “Apasionada” de la naturaleza, defiende una educación más humana, que salga a la calle y en la que se valoren las cualidades de cada niño como algo único. Autora de un centenar de artículos sobre infancia, naturaleza, arte, aprendizaje, etc, Freire acaba de reeditar y actualizar el segundo libro que escribió, Estate quito y atiende (Heder).

¿Por qué ha decidido reeditar su libro?
Esta nueva edición es mucho más el tipo de libro que yo quería desde el principio. El anterior editor quiso venderlo con la idea del TDAH, que ha levantado mucho interés y controversia, pero yo ni soy una experta en ello ni lo pretendo. No es un libro sobre TDAH. Es un libro sobre la infancia, sobre los trastornos que tienen los niños y las niñas y cómo muchos de ellos, la mayoría, tienen que ver con los entornos en los que están. El libro es una apuesta por una transformación de los entornos para que sean más saludables para la infancia.

¿Hablamos de los entornos físicos o en general?
De todo tipo. Para una criatura, el primer entorno es su padre o su madre. Pero además están los ambientes naturales, familiares, escolares, urbanos.… El ser humano es igual que una planta: se desarrolla en interacción con un entorno que satisface o no sus necesidades. En mis conferencias a veces pongo la imagen de una plántula que acaba de brotar de la semilla. ¿Por qué brota esa plántula? ¿Cómo brota? Por las condiciones de humedad, los nutrientes de la tierra, la luz del sol. Todo ello hace que se desarrolle de una forma u otra. Del TDAH ha habido mucho sobrediagnóstico, forma parte del tipo de enfermedades promovidas por la industria farmaceútica —esto lo dice un informe de la Comunidad Europea—. Que haya generado tanta controversia, que muchas personas nieguen su existencia, no significa que no haya problemas, que los niños y niñas no sufran o tengan dificultades. A mí no me interesa tanto de qué se trata sino cómo lo resolvemos, y desde mi punto de vista tiene que ver con los entornos.

Ha mencionado el TDAH. ¿Qué otros trastornos se dan entre niños y niñas?


Trastornos del aprendizaje (dislalias, dislexias, discalculias), del comportamiento (oposición desafiante, desregulación del estado de ánimo -bipolaridad-, impulsividad), autismo, asperger y toda una gama que suele mencionarse bajo una rúbrica curiosa: los trastornos generalizados del desarrollo. Pero ya le digo que no soy una especialista. Me conformo con ayudar a no poner y a quitar etiquetas.

¿Son trastornos modernos, que antes no existían?
Sí. Una persona que se dedica a estos temas en Canadá comentaba que hace 30 años la mayor parte de los niños y niñas que tenía en terapia presentaban problemas físicos. Ahora la mayoría tiene trastornos del comportamiento o el aprendizaje. El TDAH, como la depresión en el mundo adulto, son trastornos del estilo de vida, que tienen mucho que ver con la forma en que vivimos. Ahora muchos orientadores que empiezan a desobedecer: se niegan a clasificar a los niños y niñas en cajitas y ven las cosas de otra manera. También hay que dejar de situar el problema en el niño o la niña, aunque esto alivie a muchos padres, madres, maestras y maestros que no quieren sentirse culpables. La mayoría se molesta cuando el psicoterapeuta o el psiquiatra les habla de la forma de criar, de relacionarse y entender a los niños y niñas, de la forma de vida. Liberarnos de la culpa y empezar a asumir nuestras responsabilidades es una forma de madurez. Y lo que necesitan los niños, niñas y jóvenes de hoy mucho más que cualquier otra cosa, es adultos y adultas maduros, que digan sí a la vida, que asuman sus errores y sean capaces de corregirlos.

Usted trabaja con adultos. Es complicado siempre generalizar, pero, ¿es común encontrarse padres que no están preparados para educar a sus hijos?
Vivimos en una sociedad adolescente. Es muy difícil encontrar personas maduras, y este es uno de los mayores problemas que tienen los niños y niñas.

Cambio de tema. Usted aboga por educar en la naturaleza, volver al campo. ¿Qué beneficios aporta?

Muchos. Aporta relajación, un espacio abierto. Las maestras más jóvenes reconocen que una parte del tiempo que pasan en el aula lo dedican a evitar que se escapen los niños. Cuando a un mamífero lo estabulas, lo metes en una jaula, el mero hecho de estar encerrado le genera estrés. La naturaleza suaviza nuestro sistema nervioso. Aporta salud: cuando andamos descalzos nos ajustamos al campo electromagético de la tierra y se armonizan todos los sistemas orgánicos. Aporta aprendizaje, es una gran maestra. Aporta relación, comunidad. Cuando estás en un lugar abierto es más fácil comunicarse con los demás porque estás más relajado. Un árbol te enseña muchas cosas también, hay que saber escuchar. Lo más importante es que te conecta con la vida que hay en ti, con lo que es importante. Te conecta con un deseo de vida, con tu felicidad, con las cosas que te gustan y te hacen sentir bien. A los niños y niñas les ayuda a reconocer mucho mejor cuáles son sus necesidades, si necesitan correr, hablar, llorar… Su estimulación suave y no invasiva es ideal para desarrollar el sistema sensorial del ser humano, que es fundamental, y también el sistema locomotor. En la ciudad todo quiere atrapar tu atención. Un cartel, un sonido. Y ese sonido lo que hace es cerrarte el oído, mientras el canto del pajarito te lo abre. La atención continua, concentrada que demanda el mundo social y construido es agotadora, especialmente para los más pequeños.

¿Cuál es su propuesta concreta de trabajo con la naturaleza?
Darle la vuelta a las escuelas y transformarlas, que partan de la conexión con la naturaleza y lo concreto: puede ser en su entorno inmediato o cambiando su estructura. Una de las cosas que hacemos es acompañar a las escuelas en la transformación de los patios para convertirlos en espacios de vida. Para que los niños puedan tener ese contacto con la naturaleza: que haya bosquecillos, pequeñas granjas, huertos….que sean espacios vivos, que se pueden compartir con la ciudad (en algunos casos pueden ser jardines de fin de semana) y sobre todo que sean espacios donde los niños puedan desarrollarse. A partir de esa conexión con la naturaleza se transforma todo. Se transforma la manera de trabajar, ya no es media hora de recreo. Es todo lo que yo puedo desarrollar y aprender, porque el aprendizaje tiene mucho que ver con un desarrollo saludable. Si no te sientes bien, si tu organismo no se desarrolla plenamente y es difícil que puedas aprender de verdad, tu aprendizaje será más bien superficial.

¿Qué habría que cambiar en los centros educativos?
Hay tres aspectos de la escuela de hoy que es necesario transformar. Uno es acompañar a las personas para que entren en conexión con su vitalidad, sus deseos, esa vida que se mueve dentro de ellos, ese algo especial que pueden aportar al mundo. Cada ser humano es milagroso, único, y eso debería apoyar la educación. Por otro lado, la conexión con el otro. Ahora mismo, al darle tanta importancia al aspecto congnitivo, a la competencia, la evaluación, etc. se pierde la capacidad de entrar en relación, el diálogo, la amistad entre las personas. Las escuelas tendrían que ser lugares donde se hacen los mejores amigos, donde se establecen relaciones profundas de compañerismo. Donde se aprende a tomar decisiones democráticamente, a pactar, a negociar… También deben ser faros hacia fuera, abrirse al entorno, a la comunidad, expandir valores ecológicos y democráticos, de respeto e igualdad entre todos los seres vivos. Esta conexión con uno mismo, con los demás a través del diálogo —la democracia es diálogo— y la relación con la comunidad son tres aspectos básicos en la escuela de hoy en día.

Comentaba antes que hay orientadores que están dejando de etiquetar tanto a los niños, que ahora las escuelas cambian su perspectiva. ¿Cree que hay un pequeño cambio de mentalidad en la escuela?
Publicidad
Hay muchos cambios. Hace 18 años no me hubiera imaginado que pudiera haber escuelas públicas en este país donde los niños y las niñas no se pasan 7 horas atados a una silla sino que pueden circular entre el espacio interior y el exterior, elegir las actividades que quieren desarrollar, juntarse en pequeños grupos o trabajar individualmente, y que están acompañados en todos sus procesos, no solo los cognitivos sino también emocionales, sociales… Y cada vez pasa más y en más escuelas. Los orientadores se están dando cuenta de que los problemas no son de los niños. Yo suelo decir que muchas criaturas no tienen un trastorno, lo que tienen es una historia. Para cualquier persona que viene al mundo es muy difícil que se reúnan todas las condiciones para que se desarrolle correctamente. En vez de etiquetar a las personas con un trastorno, vamos a ver de qué manera su historia puede brillar. De todo se puede sacar brillo. Incluso de los errores y los problemas. La singularidad de cada persona, lo que podríamos llamar su estilo tiene que ver precisamente con los errores que comete, con sus pequeños y grandes defectos, especialmente cuando se hacen conscientes, cuando se trabajan… En cambio, vivimos en una escuela en la que se persigue el error….

Se persigue y se castiga.
Se persigue y se castiga en general lo diferente. Tenemos que ser todos normales, los padres están obsesionados con eso. Entras en cualquier foro y todos preguntan si sus hijos son normales: si es normal que coma, que no coma, que duerma, que no duerma. En lugar de preocuparnos tanto de la normalidad, de buscar a todo precio la conformidad, deberíamos mirar a las personas, a ese milagro que es cada uno y ver cuáles son sus cualidades, qué hace latir a esa persona, qué aporta esa persona de único.

Uno pensaría, sin conocer las escuelas tan bien como usted, que estamos lejísimos de todo esto…
Depende. En España hay muchas diferencias. Sería interesante hacer un estudio de lo que puede estar pasando en Cataluña o en algunos lugares del País Vasco o de Valencia y las diferencias con el resto del territorio. En Madrid, a un amigo mío le llevaron a visitar colegios innovadores de estos donde los niños van con corbata y maletín a los tres años y tienen que aprenderse los 44 morfemas de la lengua inglesa con cuatro. Son colegios de altas capacidades cuyo único objetivo es, como decía una orientadora, tirar de los niños. Algo que nunca nos plantearíamos hacer con una planta. Aunque sí podemos echarle abonos químicos… Se trata además de potenciar a toda costa sus capacidades cognitivas y nada más: nadie se pregunta cómo está esa persona a nivel emocional, qué aptitudes tiene, qué valores, qué cosas le gustan o le disgustan. Estamos haciendo máquinas cognitivas, máquinas de hacer cálculos y pensar. Las demás dimensiones de las personas, ¿no le importan a la educación? Contenidos, contenidos y la competición continua. ¿Eso es educar?

jueves, 21 de septiembre de 2017

HAZI Centro de Psicomotricidad

HAZI es un espacio de Ayuda Psicomotriz,
donde desde el respeto a la expresividad global,
se ofrece ayuda a la infancia  y a sus familias
en colaboración y orientación educativa.




Atendemos aquellas dificultades 
de la expresividad psicomotriz u otros malestares
surgidos en el proceso del CRECER.





La  sistémica familiar nos ayuda a ampliar
nuestra mirada, nuestra comprensión de las diferentes dificultades, repeticiones...
Resultado de imagen de imagenes sistemica familiar




También ofrecemos un ESPACIO DE JUEGO CON FAMILIAS
para acompañar a la familia y al bebé y niño en su desarrollo
desde una perspectiva pikleriana.


Resultado de imagen de imagenes piklerianas




Atendemos...

  • Dificultades en la comunicación, juego...
  • Dificultades en canalizar la agresividad
  • Niños que en su relación con los demás son muy invasores...
  • Con tono muscular rígido y poca plasticidad....
  • Niños que se muestran inhibidos...
  • Dificultades en la escucha
  • Dificultad para aceptar la frustración
  • Con un mundo de fantasía muy invasor
  • Etc.




También acompañamos a los más pequeños 
en Atención Temprana.

Si deseáis mas información podéis poneros en contacto: 

Tfnos: 615707530   y   693381443

HAZI Psikomotrizitate Zentroa

HAZI Psikomotrizitate Laguntza gunea da. Bertan, adierazpen globala errespetatuz laguntza eskaintzen da haurrarenzat eta familiarentzat, kolaboratzailea eta orientatzailea den heziketa esku-hartzetik.





 Haurraren HAZTE prosezuan agertzen diren adierazpen psikomotoreko nahiz beste erako zailtasunekin lan egiten dugu. 



Familia sisteman egindako lanak, zailtasun edo errepikapenen...  aurrean,  gure begirada eta ulermena zabaltzen laguntzen gaitu.




Resultado de imagen de imagenes sistemica familiar

Baita  eskeintzen dugu ere FAMILIA JOLAS EREMU BAT ,  familia eta euren haurrei zuzenduta, bidelaguntza izateko Pikler pedagogiaren ikuspegiaren bitartez.


Resultado de imagen de imagenes piklerianas



Besteak beste, tratatzen ditugu:

  • Zailtasunak komunikazioan, jolasean....
  • Agresibitatea
  • Egonezina ezberdinak
  • Zapuzketen eraman ezina
  • Harremanetan zailtasun ezberdinak
  • Gorputz gihar tonoa eta mugimendu zurrunak
  • Oreka mantentzeko zailtasunak
  • Beti bakarrik jolasten dutenak
  • Inhibizioak
  • Zailtasunak bestea entzuteko
  • Irudimen gutxi
  • Fantasiazko mundu inbaditzailea
  • Etabar.

Baita haur txikiak laguntzen ditugu ere Arreta Goiztiarrean

Informazio gehiago: 615707530 -693381443

lunes, 18 de septiembre de 2017

Pikler Simposio Internacional Budapest






Pikler Simposio Internacional Budapest, 4-7 abril 2018 “Observar para comprender”

 Es indispensable registrarse aquí: http://pikler.kmcongress.com/es/jelentkezes 

Informaciones prácticas

 1) Budapest, la ciudad hospedadora Budapest es la capital y la ciudad más importante de Hungría y una de las más importantes de la Unión Europea con su 1.760.000 habitantes. La historia de la ciudad comenzó con la capital romana de Pannonia Inferior, Aquincum. Los húngaros llegaron al territorio de Budapest actual en el siglo 9. Las primeras localidades fueron destruidas por los Mongoles en 1241. La ciudad renovada se transformó en el centro de la cultura humanista del Renacimiento en el siglo 15. Después de la batalla de Mohács en 1526 vino el período de ocupación Turca durante casi 150 años. Luego, la región entró en una nueva época de prosperidad y Budapest se convirtió en una ciudad global con la unificación de Buda y Óbuda a la orilla occidental del Danubio y de Pest, a la orilla oriental. Hoy día Budapest es una de las metrópolis del mundo con una vida dinámica en el sector del comercio, finanzas, medios de comunicación, artes, moda, investigación y tecnología, enseñanza y diversión.

Budapest se considera como una de las ciudades más bonitas de Europa. La zona central de la ciudad hace parte del Patrimonio mundial de humanidad de Unesco con varios monumentos famosos, como el Parlamento, el Castillo de Buda, el Puente Széchenyi, la Iglesia de Matías y la Estatua de la Libertad. Otras curiosidades para ver son la avenida Andrássy, la Basílica de San Esteban, la Plaza de los Héroes, el Gran Mercado, la Estación de ferrocarriles, construida por la Compañía Eiffel de Paris en 1877 y la línea de metro segunda más vieja del mundo, los ferrocarriles subterráneos del Milenio. En la ciudad hay unas 80 fuentes geotérmicas y un sistema de cuevas con agua termal extenso.

2) Precios de participación y plazos Precio de participación hasta el 31.12.2017: 380€ Precio de participación después del 01.01.2018: 430€

3) Lugar del congreso Centro de Congreso de la avenida Villányi H-1114 Budapest, Villányi út 11-13.
http://villanyiut11.hu/

MAS INFORMACIÓN EN:
https://gallery.mailchimp.com/b5ae0d49737fa4994725f8d7d/files/7cf7a3cf-94d4-45f3-b973-765f0eaf223a/Logisctics_Spanish.pdf

Detrás de un niño difícil hay una emoción que no sabe expresar

Detrás-del-niño-difícil-hay-una-emoción-que-no-sabe-expresar
Son muchos los padres y las madres que se quejan de que su niño es muy difícil, que siempre le ronda una emoción cargada de rabia que desahoga de forma inapropiada. Con rabietas, malas palabras o con sutiles actos de desobediencia.
Hemos de tener claro que ningún niño es igual a otro, y que ninguno de nosotros podemos saber tampoco qué tipo de necesidades pueden tener esas criaturas que acabamos de traer al mundo y para las cuales, deseamos todo lo mejor.
La emoción es la fuente de energía humana, es la llave que debe guiar a los niños, primero para entenderse a sí mismos, y para después, entender al mundo.

Los niños difíciles suelen a su vez generar muchas veces un nivel de estrés muy elevado en los padres, rozando en algunos casos la indefensión. No es un tema sencillo de abordar, y de hecho, no siempre nos valen los libros, ni si quiera la experiencia que tengamos con otro de nuestros hijos o las recomendaciones de algunos padres.
Tu hijo, el niño difícil, es único, especial e irrepetible. Y si hay algo que necesitan siempre es comprensión. La mayoría de las veces son niños con altas demandas encerrados en sus “palacios internos”, en espacios herméticos donde no encuentran puertas mediante las cuales, expresar esa emoción contenida. Esa necesidad. Hoy en nuestro espacio te invitamos a reflexionar sobre ello.

Los niños difíciles y la emoción contenida

niña jugando conteniendo su emocion
Pongamos un ejemplo. Piensa en ese niño que ha tenido un mal día en el colegio, llega a casa y cuando sus padres le preguntan qué ha ocurrido, éste responde de mala manera. Ante esto, los padres deciden castigarlo en su habitación toda la tarde. ¿Qué hemos ganado con esto? ¿Hemos solucionado el problema? En absoluto.
La emoción bloqueada es una espina rodeada por un muro de piedras. Si levantamos más muros la espina quedará aún más escondida, así pues, el primer paso será ir retirando cada piedra de esa pared a través de la comunicación y el afecto.

Si el niño difícil nos pone muros, no levantes nuevas ciudadelas a su alrededor, no lo aisles, no lo descuides, no lo dejes solo. Todos tenemos claro que el proceso para llegar hasta ellos es complejo, no obstante, debes tener en cuenta estos aspectos previos:
  • Un niño difícil no siempre es consecuencia de una mala crianza. No debes culpabilizar a nadie.
  • Hay niños con altas demandas que piden muchísimo más que el resto, es su personalidad, su forma de ser y ello no quiere decir que nosotros, como padres, hayamos hecho algo mal.
  • Un niño que demanda y no recibe lo que busca o que no sabe expresarlo, acaba frustrándose. Son muchas las veces que ellos mismos se ven sobrecargados por un sinfín de emociones: esa rabia que a oscila con tristeza, otras con hastío, a veces con enfados…
  • Los niños difíciles requieren un mayor nivel de atención, comprensión, apoyo e incluso creatividad por parte de los padres.
niño descansando y aliviando su emocion (1)
Debemos ser artífices de sus mundos, unos mundos seguros donde se sientan cómodos para expresar esa emoción contenida que les permita conocerse, desahogarse, sentirse más libres y seguros para avanzar por cada uno de los escenarios que definen al niño a lo largo de su ciclo vital.

Como ayudar al niño difícil a canalizar sus emociones

Ya sabemos que el niño difícil demanda ante todo nuestra atención y cada una de las estrategias que podamos darle de forma creativa, para atender sus necesidades. Para ayudarle a gestionar todo ese mundo emocional que en ocasiones lo desborda y lo bloquea.
Recuerda siempre que la Inteligencia Emocional no es un rasgo, es una habilidad y por tanto como padres, como madres, es nuestro deber trasmitir a nuestros niños estas estrategias, este aprendizaje.

Toma nota de qué pasos deberíamos seguir para educar a los niños difíciles en este campo, en esa dimensión donde canalizar, donde dar forma y expresar esa emoción contenida.

Si al poder del refuerzo positivo

Si a un niño difícil le recriminamos sus errores, si lo infravaloramos, o lo reprendemos por sus reacciones, generaremos aún más rabia y más ansiedad. Recuerda siempre que este tipo de niños, en el fondo, son muy frágiles y disponen de una baja autoestima.
  • Usa verbalizaciones tan simples como: “yo confío en ti”, “yo sé que vas a poder con esto”, “yo sé que eres especial”, “yo sé que eres un niño valiente y por eso te quiero”…
Una palabra positiva genera una emoción positiva, y una emoción positiva genera confianza.

Sí a la comunicación que no juzga, que no compara ni sentencia

Hay padres y madres que cometen el error de comparar al niño difícil con sus hermanos, o con otros niños. No es lo adecuado. Al igual que es un error iniciar un diálogo que ya implica determinadas sentencias: “como, tú eres vago, tú nunca escuchas, tu siempre te portas mal…” Evita este tipo de comunicación y sigue siempre estas pautas:
  • No sondees, no interrogues. Descubre cuál es el momento en que el niño se siente más cómodo para hablar.
  • Dale confianza, cercanía y comprensión. Cuida mucho el tono de tu voz, es algo básico para conectar con los niños.
  • La comunicación debe ser diaria y continuada.
  • Nunca te rías o ironices de lo que te digan tus hijos. Para ellos es importante, y si encuentran esa falta de empatía por tu parte evitarán sincerarse contigo.

Sí a propiciar un equilibrio interno en el niño

niño descansando y aliviando su emocion (2)
  • Enséñale que cada emoción puede trasformarse en una palabra, que la rabia tiene forma, que la tristeza se puede compartir para aliviarla, que llorar no es malo y que tú siempre estarás ahí para escucharles.
  • Enséñale a respirar, a relajarse, a canalizar sus emociones a través de determinadas actividades con las que desahogarse y distraerse…
  • Enséñale a aceptar la frustración a que el mundo no puede ser siempre como ellos quieren.
  • Enséñales a escuchar y a hablar con asertividad. Diles que su voz siempre va a ser escuchada, que todo lo que diga es importante para ti…
  • Enséñales a tener responsabilidades, a valerse por sí mismos en cada paso y decisión que dan…
Imágenes cortesía de Nicoletta Ceccoli, via Lamentesmaravillosa


http://rincondeltibet.com/blog/p-detras-de-un-nino-dificil-hay-una-emocion-que-no-sabe-expresar-5848